La jirafa es un animal inconfundible, su cuerpo alto y delgado cubierto de manchas es inusual, y la mayoría de la gente disfruta viéndolo. De hecho, son uno de los animales más visitados en los zoológicos de todo el mundo. También es el más alto, aunque eso no impide que se convierta en presa de una gran variedad de consumidores de carne.
Son animales muy tranquilos y se alimentan de las plantas de su hábitat natural. En lo alto de los árboles encuentran la mayoría de la comida que consumen. Esto significa que tienen más disponibilidad de alimentos que el resto de los animales.
Las hembras tienden a llevarse muy bien en sus rebaños. Los machos jóvenes son muy competitivos, pues del poder depende el derecho a aparearse con las hembras. Puede pasar un tiempo muy largo antes de que sean lo suficientemente fuertes para ser capaces de aparearse, razón por la que se les ha visto involucrarse en conductas sexuales con otros machos.
Cada jirafa es única en el mundo, tienen su propio patrón de manchas, lo que le sirve a los investigadores para identificarlas tanto en el medio silvestre como en cautiverio. Estas manchas varían en tamaño, forma e incluso color. Los machos las tienen más oscuras y no tiene pelo en la parte superior de sus cuernos.